Mira que son únicos.
Nada como mamá, nada como mamar. Animo a las mujeres a que den de mamar a sus bebés, por muchísimos motivos. Librémonos de prejuicios, de creencias falsas acerca de la lactancia materna, confiemos en nuestro cuerpo y en nuestra condición de mamíferos. Es una decisión por tanto personal, ¿pero que nos cuesta tener toda la información para decidir si queremos o no hacerlo?
Cada noche cuando acabo de acurrucarme con mi niño y antes de salir de su habitación le digo:
Tengo muchos planes pero tengo que ir encontrando el camino que creo me va a llevar a buen puerto y que seguro me dará muchas satisfacciones. Me gustaría explotar mi creatividad, por ejemplo mediante la escritura, así que se me están ocurriendo ideas para ilustrar mis cuentitos, seguir escribiendo e intentar conseguir presentarlos en centros culturales, centros de crianza, etc... Además esta mañana he ido a visitar un centro de crianza en Barcelona, salud familiar, terapias para embarazadas, etc..., me parece un proyecto bonito e interesante. Marta es la persona que lo ha abierto con mucha ilusión. Yo recibí un e-mail que comunicaba la apertura de L'Ombeliqo, me llegó de casualidad, y ni corta ni perezosa contacté con Marta para mostrar mi interés en su proyecto y ofrecerle mi ayuda si en algún momento pudiera necesitarla. Tengo muchas ganas de colaborar en actividades de este tipo y he intentado aportar ideas que puedan dar opciones en su agenda de talleres y reuniones para familias. Incluso ella ha sido tremendamente amable cuando me ha dicho que si quisiera podría presentar un cuento en la sala de su centro, ¡¡¡me ha hecho mucha ilusión!!!
Hace tiempo me encontré con un blog que leí y el cual me dejó patidifusa con el testimonio de la redactora, me hizo pensar y meditar acerca del hecho de que haya personas que saquen a sus niños a pasear atados con una correita como si de un perro se tratara. De hecho este cartel en un establecimiento en América dice " Los perros son bienvenidos, los niños deben ir con correa", ésto es increíble de verdad.
ener a los niños controlados en lugares con mucha gente es la correita, es fácil y no tienes que preocuparte de que vayan a desaparecer "como la Madelein", dijo uno de los "iluminaos", que desde luego sacar este nombre sin consideración me parece lo peor. Imaginaros como se me erizó el bello, porque dentro de mí pensé en el poco sentido que tenía que yo expusiera mis ideas y mostrase mi respeto por los niños, ¿era perder el tiempo y frustrarme?. Me enojó la facilidad para dar soluciones, la inconsciencia para opinar, la sandez como protagonista, y las risas estúpidas de algunos, otro dijo "¡¡¡a mí me ataron a pie de ventana cuando era chico y yo no tengo ningún trauma!!!", ¿y yo qué hago? ¿me echo las manos a la cabeza ó le digo que comience terapia ya?. Finalmente mantuve la compostura pero añadí "los niños no son perros, yo no lo apruebo en absoluto", ésto marcó distancia momentánea con personas que veo cada día pero no me importa lo más mínimo, de hecho lo prefiero.

Volviendo a la carta solicitando permiso para estar presente en el parto de Carmen, ya tenemos el veredicto final, y es que "sí, sí que me autorizan a entrar en la sala de partos". Carmen consiguió contactar con la persona responsable la cual le dijo que ya tenía a todo el personal avisado. ¡¡¡Qué bien!!!.Este es mi diario, de mis descubrimientos, sentimientos, sensaciones y vivencias. Quiero compartirlas.